Disputas en torno al ensayismo en la sociología argentina (1950s-1970s)
Autor | Juan Pedro Blois |
Cargo | Investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y profesor del Área de Sociología de la Universidad Nacional de Gral. Sarmiento (UNGS). E-mail: pedro.blois@gmail.com |
Páginas | 60-87 |
DOI: http://dx.doi.org/10.5007/2175-7984.2019v18n41p60/
6060 – 87
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Disputas en torno al ensayismo en la
sociología argentina (1950s-1970s)
Juan Pedro Blois1
Resumen
El desarrollo de la sociología como disciplina cientíca no se dio en ningún país del mundo como
una operación en el vacío. Dependiendo del medio intelectual en el que se buscaba implantarla, los
sociólogos debieron armar su empresa en el marco de un ecosistema conformado por un conjunto
diverso de productores culturales y disciplinas. En Argentina, como en el resto de América Latina,
la principal oposición se dio con el llamado “ensayismo”, un género, de signicativo prestigio y
gravitación intelectual, cuyos orígenes se remontaban a la primera mitad del siglo XIX. Basado en un
amplio corpus empírico (publicaciones especializadas, documentos, revistas masivas, entrevistas), este
artículo se propone reconstruir los diversos posicionamientos que los sociólogos asumieron frente al
ensayismo en el período que va desde mediados de los años cincuenta hasta mediados de los setenta,
período de fuerte expansión institucional y de marcados conictos al interior de la disciplina.
Palabras clave: Sociología. Ensayo. Ciencia. Argentina.
Introducción
El desarrollo de la sociología como disciplina cientíca no se dio en
ningún caso como una operación en un vacío. Lejos de ello, dependiendo
del medio intelectual en el que se buscaba implantarla, sus promotores
debieron armar su empresa en el marco de un ecosistema conformado por
un conjunto particular de productores culturales; productores que, desde
diversos registros u orientaciones, se ocupaban de la reexión y estudio
de buena parte de los temas y problemáticas que los sociólogos buscaban
1 Investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y profesor del Área de
Sociología de la Universidad Nacional de Gral. Sarmiento (UNGS). E-mail: pedro.blois@gmail.com
Política & Sociedade - Florianópolis - Vol. 18 - Nº 41 - Jan./Abr. de 2019
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ahora reivindicar como jurisdicción propia. En los países centrales, la nueva
disciplina debió hacer su lugar tomando distancia de los cuerpos de saberes
clásicos como la losofía, la historia y la literatura (LEPENIES, 1998)
pero también de otros más recientes como la psicología o el trabajo social
(TURNER, 2014). En América Latina, en cambio, la principal oposición
se dio con el llamado ensayismo, un género intelectual cuyos orígenes
se remontaban a la primera mitad del siglo XIX y que supo ocupar un
lugar central en el campo de las interpretaciones sobre la realidad nacional
(JACKSON; BLANCO, 2014). La toma de posición frente a ese cuerpo
de ideas fue, en ese marco, una iniciativa central en la búsqueda de un
espacio propio para la nueva disciplina. El caso argentino, que aquí me
propongo abordar, ha sido un claro ejemplo de ello.
Las tensiones entre sociólogos y ensayistas en la Argentina pueden
ser rastreadas desde nes del siglo XIX cuando surgen las primeras
cátedras universitarias de sociología y comienza a haber un conjunto de
intelectuales que se identican a sí mismos como “cientícos”, planteando
un estilo de trabajo que se presentaba como “sistemático” y “objetivo”
(ALTAMIRANO, 2004). La cuestión, no obstante, reconoce un claro
punto de inexión a mediados del siglo pasado cuando la creación de la
primera carrera de sociología en la Universidad de Buenos Aires (UBA)
coincidió con la armación de una corriente, la “sociología cientíca”,
que sobre la base de la conanza en las nuevas metodologías y teorías
desarrolladas en los centros mundiales de la disciplina, planteó una tajante
ruptura – que no ocultaba su desprecio – con las formas en que hasta allí se
había abordado el estudio de la sociedad argentina. Semejante operación,
claro, no demoró en suscitar una aguda disputa con los cultores del ensayo
que veían amenazado su ascendiente. Pero, en el marco de una comunidad
sociológica que rápidamente se iba ampliando y diferenciando, generó
también la respuesta de un conjunto de sociólogos que, a tono con los
discursos antiimperialistas que ganaban fuerza a comienzos de los años
sesenta, llamaron a la construcción de una “sociología nacional” basada en
buena medida en la recuperación del ensayismo.
Las relaciones entre la sociología y el ensayismo en la Argentina
han despertado el interés de un buen número de estudiosos. Mientras
algunos se han preocupado por dar cuenta de las estrategias de distinción
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